Una vez hace mucho me dijiste que tuviera miedo de mayo.
¿De qué me sirve temerle a mi cumpleaños sin un mes tuyo cada año?
Me debiste decir que temiera a octubre, el mes de la tormenta de tu pelo.
El mes en que tu nombre suena a canción y te extraño 500 noches a falta de un para siempre.
Una vez me dijiste que estaba viejo, perdón que envejecías a mi lado.
Suena a tus ganas de volverme extranjero en mi embajada de la vida.
Y así pasaron los años, rogando no poder tocarte ni en canciones.
Ay Priscila que suenas a Eugenia.
Y un día como hoy dieron las 10, las 11 y las 12… y zas! De pronto llega un año mas a la orilla de la chimenea de tu vida. Nos sorprende la luna, el recuerdo.
Una vez me pediste que no te pida ser mi amiga, en un tono serio.
Pues tenías razón, esa mujer maravillosa que hoy cumple años no puede ser mi amiga simplemente, debe ser mi mejor amiga para siempre.
Ojala que hoy, y cada uno de los días por venir Dios me dé el privilegio de contarte a ti entre las personas más importantes de mi vida, y me enseñe, amargue, entristezca, alegre y perdure este saludo sincero que hoy te dedico de mi más puro corazón para ti.
Feliz cumpleaños Deixa.
